Bar Casa Mensaque. Alfareros de Triana que hacían loza fina

Cantaban Los Romeros de la Puebla aquello de: "Alfareros de Triana, Triana, que hacían loza fina”. Y una de las familias más señeras en aquellos menesteres artesanos tradicionales del arrabal, era la de los Mensaque. La renovación total de un local que acogía una cafetería en la trianera calle Castilla, es ahora un bar muy pinturero, flamenco y taurino, que se llama Casa Mensaque. Tal nombre y tal ubicación obligan a mucho, no digamos que para tirar cohetes, pero el bar pasa la nota con algo más de aprobado en una primera visita.

Porque, tapas aparte, el sitio cautiva por sus detalles, por el amable servicio, y a mí, particularmente, por su oferta de vinos por copas, donde además hay una buena representación de vinos andaluces. Y qué quieren que les diga, tiene gracia hasta su original vajilla de flamencas y toreros, alegre y colorista. Se tira Cruzcampo de barril, hay mesas altas dentro y fuera y un recogido rinconcito de mesas para quien quiera estar sentado más cómodo. 

Cojamos como primera piedra de toque para sumergirnos en su pizarra de tapas y raciones, la ensaladilla de marisco, fresca, mahonesa cremosa, buen sabor, para mi gusto un tanto crudas las gambas, pero está rica. El adobo sevillano, o sea, cazón frito en adobo, no traía buena pinta pero luego resulta que también está rico. Hay montaditos, muy bueno el de pringá y bien también el de langostinos con alioli. 

Algo de cuchara había que probar y me decanté por los garbanzos con langostinos, servidos en una simpática sartén, el sabor está conseguido, cortitos los langostinos de tamaño y de número. Esta última tapa aparece en la carta como una de las “sugerencias del chef”, donde además se mencionan otras como la carrillada, espinacas con garbanzos, atún encebollado, carne con tomate y el menudo, este último lo dejaré para cuando me acompañe al sitio mi amigo, Raimundo de Hita que es fan de plato tan sevillano y que tan bien nos está narrando por capítulos todo el periplo de un vecino de calle, El Cachorro, por Roma en las web de SevillaInfo. 

Los precios, para como está la cosa últimamente, aceptables. Cerveza fría y el blanco del granadino Valle del Mincal, muy bueno, Diez días de Marzo de Bodegas Vilaplana, amenizaron la velada, que no hay mejor cosa después de una visita a una exposición artística que un buen vino y unas tapitas. Ole Triana, “con mirarte solamente me muero de alegría”.

Bar Casa Mensaque

C/ Castilla, 17

41010 SEVILLA