Balenciaga, una gran serie

Hartos de ver en los últimos tiempos películas y series basadas, más o menos, en biografías de famosos, biopic le llaman, sobre todo por parte de producciones estadounidenses, centradas en lo más miserable de los personajes, reconforta ver una serie, además española, como la dedicada al gran modisto de Guetaria, Cristóbal Balenciaga.

El último horror que he visto anteriormente ha sido la película sobre el maestro, Leonard Berstein, perpetrada por  Bradley Cooper (director y protagonista), se llama ‘Maestro’ (2023) y está producida por los campeones mediáticos de la cultura woke, Netflix. En este film sobre el compositor y director de orquesta, como suele pasar últimamente en este tipo de películas, se recrean en lo sórdido, orillando habitualmente su carrera profesional que es mera excusa para escenas de sexo, alcoholismo, traiciones, deslealtades y un largo etcétera, ojo, que no digo que eso no se de en ellos, se da en todo el mundo, recordemos Blonde (2022) también en ese sentido.

La serie (6 capítulos) Balenciaga es un alarde de estilo refinado, de elegancia, de fantástica puesta en escena (solo un fallo, en los años sesenta no existían en el techo de los taxis españoles esa barra de aluminio con el rotulo luminoso TAXI, simplemente llevaban una luz verde en una esquina del techo, el chivato, que se encendía cuando iban libres). Se ignora lo escabroso, lo explicito, igual que era la personalidad del propio Balenciaga, un señor discreto y elegante, lejos de escándalos y lejos de airear su vida privada. 

La serie se centra en la carrera profesional del gran diseñador de modas español, nos muestra los secretos de su maison parisina, también de la casa de modas en Madrid, su piso parisino, su casa en su costa vasca natal. Se muestran los procesos creativos, el afán perfeccionista de un icono de la alta costura mundial, las pruebas a clientas y modelos y los desfiles con sus deslumbrantes vestidos. Quizás algo lenta en un par de capítulos, pero la serie en general deja un gran sabor de boca, la sensación de que hemos gozado de una gran producción que nos enorgullece que sea española.

Y eso que la productora de la serie es Disney+, otra inmersa en un caos ideológico que le está acarreando serios problemas en sus últimas producciones, con una obsesión por lo políticamente correcto que le está acarreando una gran caída de espectadores en series y películas, como actual ejemplo la demencial deriva y vicisitudes del rodaje de la nueva ‘Blancanieves’, para morirse de risa…o llorar ante tanta memez.

Por terminar con buen sabor de boca y con la reseña de la serie Balenciaga, mencionar unas muy correctas actuaciones, desde el mismo protagonista, un sobrio Alberto San Juan hasta todos los secundarios. El único personaje que me chirría un poco es el de la reina Fabiola, no veo a Belén Cuesta en el papel de tan refinada dama. Muy buena banda sonora de Alberto Iglesias, que no molesta a los diálogos, como es demasiado habitual en muchas series y películas.

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