Los Romeros de Alanís, jamón de Sevilla
De la mano de María José y Roberto Romero, hijos respectivamente de los dos hermanos fundadores de la empresa familiar sevillana, Los Romeros de Alanís y con la siempre eficiente organización del acto de la agencia Probando Probando, un pequeño grupo de compañeros de medios especializados, tuvimos la oportunidad de conocer de primera mano el nuevo proyecto de Los Romeros de Alanís en el sevillano barrio de Nervión.
En una esquina estratégica de la calle Luis Montoto, en el número 130 y teniendo de vecino a El Corte Inglés, esta empresa de la Sierra Morena sevillana ha abierto una coqueta abacería, tienda y bar, donde se contienen, como en un joyero lleno de buenas piezas, los más privilegiados productos del cerdo ibérico. Da gusto observar al experto cortador, al fondo del local, tocar el aromático y gustoso violín bellotero con un decorado de fondo de atractivos perniles porcinos.
Los paisajes del entorno del Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla no solo son un
panorama maravilloso para el paseante, sino un contenedor de suculentas
propuestas gastronómicas. Comarca hermana de las dehesas del sur de Badajoz y
de la Sierra de Aracena onubense, a las excelencias del cerdo ibérico, se unen allí
otras exquisiteces como la carne de caza, las setas y, sobre todo en el caso
sevillano, las bodegas donde se crían excelentes vinos.
Para completar una atractiva carta se tira Cruzcampo de grifo y hay una buena selección de vinos donde la mayoría se pueden copear. Dicha carta obviamente contiene todos los productos del cerdo ibérico, con un tremendo jamón y una no menos deliciosa caña de lomo. El lomito de presa es un espectáculo. Jugoso el pan de salmorejo y jamón. Más elaboradas las láminas de pan de Obando con un suculento tartar de salchichón. Si estos preámbulos no fueran ya causa suficiente de visita al local, que lo son, hay mucho más, como unas gustosísimas albóndigas de solomillo al whisky con velo de panceta o un fantástico paté que vino con una confitura de pimientos rojos y tostaditas para untar. Si se quedan con hambre pueden tirar de guisos o de las llamadas “pulguitas”, unos sabrosos montaditos donde pueden probar el de chorizo picante, que no lo es tanto, o una morcilla de hígado, esta traída de Coripe.
Unas 6.000 hectáreas de finas repartidas entre la Sierra
Morena de Sevilla y Badajoz, con un 90% de encinas y un 10% de alcornoques, por
cierto, maderas de las que se hacen los platos donde se sirven algunas viandas
en la abacería, son el origen de todos estos productos que hablan de la calidad
y excelencia de una empresa familiar que está poniendo a la altura que merecen
las chacinas y jamones de Sevilla.
Los Romeros de Alanís
C/ Luis Montoto, 130
41018 SEVILLA





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