Eneko Atxa presenta sus novedades en Basque Sevilla

El claro mediodía del jueves 2 de Marzo, estábamos citados los medios gastronómicos de la ciudad, en Basque Eneko Sevilla, la apuesta gastronómica del chef vasco, Eneko Atxa en la capital hispalense. Radicado en los bajos del flamante Radisson Collection Hotel, con magnífica terraza en la misma plaza de la Magdalena, en el centro de Sevilla.

Menú Degustación Labur, es el conjunto de platillos que tuvimos la oportunidad de probar, con la compañía del mismo Eneko y, sentado a la mesa, la del alcalde de la ciudad, Antonio Muñoz. El cocinero de Amorebieta es un tipo cercano y simpático, no sé quién fue el que dijo que el problema de la crítica gastronómica en España es que nos hemos hecho demasiado amigos de los cocineros, puede ser, pero la verdad es que Eneko es sencillo y afable, se hace querer a las primeras de cambio. 

Eneko Atxa y Antonio García

En la presentación, junto a Eneko Atxa, chef que atesora por el momento cinco estrellas Michelin (tres en la casa madre, Azurmendi) estaba el jefe de cocina de su local en Sevilla, el utrerano, Antonio García. Destacar el servicio de Basque Eneko Sevilla, eficiente, con tiempos perfectos y profesional simpatía en su punto justo.

Los vinos, los elegidos para acompañar el menú fueron, en blanco, el Txacolí Gorka Izagirre, con las uvas Hondarrabi Zuri y Hondarrabi Zerratia a partes iguales, fresco y fácil. En tinto, Camins del Priorat, el hermano pequeño de la bodega catalana del riojano, Álvaro Palacios.

El alcalde, Antonio Muñoz y el comunicador,
Carlos Herrera, entre los comensales

Pero entremos en lo que llegó en la variada vajilla. Un Brioche casero y mantequilla de perejil, que estaba poco esponjoso, la mantequilla demasiado atemperada. En segundo lugar una Tartaleta de atún y caviar, con un producto muy sabroso y el mérito de la tartaleta casera de setas, que es perfecta base del bocado. Magnífico aroma de mar precede a un muy rico Txangurro frío, uno de los mejores bocados de la tarde. Y del mar al bosque, profundo sabor, potencia en Guinnes del bosque, sinfonía de setas. Terminamos los entrantes con un Pescaito frito, bilbaína y jugo de pimientos al carbón, que en la boca nos remite más a sabores japos que a la freiduría andaluza. 

El “Principal”, Cola de toro guisada y deshuesada, gnoquis de Idiazábal y trufa. Yo, qué quieren que les diga, soy más del hueso y la gelatina del guiso tradicional, por otra parte el queso del gnoqui le resta protagonismo a la carne.

Un muy sabroso postre de estirpe casera vasca, Goxua y helado de caramelo fue magnífico final del menú.

Con sus matices por pulir en la cocina, Basque Eneko Sevilla se consolida como la única alternativa para probar en la ciudad las elaboraciones creadas por un chef tres estrellas Michelin, claro, con un concepto más "desenfadado" y barato, por ahora el camino es bueno, el público de la ciudad, afortunadamente, ya va mirando de otra manera a restaurantes de alta gastronomía como este. Lo seguiremos de cerca.